Jericoacoara
EL PUEBLO
Jericoacoara, más conocido como «Jeri», es un pueblo de pescadores único, descubierto por los windsurfistas en los años 80. Desde entonces Jeri nunca ha dejado de crecer, sabiendo siempre mantener un encanto único.
En las calles de arena se mezclan todos los idiomas, y en los bares y restaurantes la música pasa al ritmo de samba. Es un pueblo atípico y muy festivo con un atardecer inolvidable que da la bienvenida a la noche y su ambiente inimitable.
NATURALEZA
Atravesando los campos de dunas del Parque Nacional de Jericoacoara, se descubre un paisaje inesperado, la Lagoa do Paraiso. Una laguna de agua dulce donde pasar el día bañándose y comiendo pescado fresco con los pies en el agua.
Otra excursión llena de aventuras es la de la Lagoa de Tatajuba. Habrá que atravesar el río Guriú, cruzar sus zonas de manglares secos para llegar a el área de descanso con más diversión, donde las dunas más altas de la región encierran lagunas con sorprendentes atracciones.
KITESURF
Es una región privilegiada para la práctica del kitesurf, ya que los vientos son fuertes y constantes, con picos de más de 40 kn durante la temporada alta.
La playa de Jeri está reservada para el windsurf o el surf, y su Praia da Malhada tienen unas rocas que dificultan el acceso al agua, por lo que se disfruta del kite en los spots vecinos.
La interminable Praia do Preá, donde cada año se celebra la final de la copa del mundo de kitesurf, permite navegar en mar abierto con total libertad, mientras que en Guriú la desembocadura del río deja un terreno de juego plano y tranquilo.
