Baléia
EL PUEBLO
A principios del siglo pasado, una comunidad de pescadores se instaló en esta bella y enorme playa bordeada por cocoteros, formando con los años el pueblo de Baleia. Un lugar tranquilo que vive al ritmo de la pesca y del comercio local.
Su nombre viene de los restos de una gran cachalote que derivó y quedó atrapado en las arenas de su playa, restos que están aún presentes y se pueden ver sólo durante algunas mareas excepcionalmente bajas.
NATURALEZA
Detrás de Baleia se encuentran sus Lençóis Baleienses, un conjunto de lagunas de agua de lluvia que quedan encerradas entre las dunas que rodean al pueblo, un paisaje sorprendente.
En el cercano río Mundaú el paisaje cambia completamente, los manglares se hacen paso a medida que se alejan de la costa, mientras que del otro lado del pueblo, en plena playa, las piscinas naturales ofrecen un lugar de reposo único.
KITESURF
Su playa tiene unas zonas de arrecifes que desaparecen completamente con marea alta, fácilmente visibles y evitables con marea baja, pudiendo navegar entre ellas con toda tranquilidad.
De camino a Mundaú, se pasa por una bella playa desierta con unas condiciones excelentes. Una vez allí, la desembocadura del río ofrece un spot increíble, pudiendo entrar en él y navegar entre los manglares. Sus sedimentos cerca de la costa deja una zona de aguas planas con un paisaje inolvidable.